5 cosas que una persona con autismo quisiera que todos supieran

Cada 2 de abril se conmemora en el mundo el Día de la Concienciación sobre el Autismo, con el fin de promover la inclusión y una mejor calidad de vida de las personas con autismo, con el foco puesto ni más ni menos que en la INFORMACIÓN. 

¿Qué es TEA o Trastorno del Espectro Autista?

TEA se define por un cierto conjunto de comportamientos y es una “condición del espectro” que afecta a los individuos de manera diferente y en diversos grados. No se conoce una sola causa de autismo, pero algunos de los comportamientos asociados incluyen: 

• El aprendizaje retrasado del lenguaje
• La dificultad para hacer contacto visual o mantener una conversación
• Habilidades motrices reducidas y sensibilidades sensoriales alteradas 

Una persona en el espectro podría seguir muchos de estos comportamientos, o tener otros distintos no mencionados aquí o incluso presentar tan solo uno solo. Por eso se habla de espectro, porque el margen y el grado pueden ser muy amplios y variar drásticamente de persona en persona. 

Cosas que una persona con autismo necesita que todos sepamos

Hay muchos mitos y mucha desinformación en torno a cómo vincularse con personas del espectro autista. Según los especialistas, es clave que toda la sociedad comprenda cuales son los elementos básicos del autismo, para poder integrarlos a la vida cotidiana. 

A continuación, te presentamos 5 cosas que una persona con autismo quisiera que todos sepamos

1. Mis percepciones sensoriales son distintas a las tuyas

La integración sensorial es, posiblemente, el aspecto más difícil de entender en el autismo. Significa que las imágenes, los sonidos, los olores, gustos y las texturas que para uno son las más normales del mundo, son estímulos muy fuertes (e incluso dolorosos) para las personas con autismo.

2. Si no entiendo, repetilo y mostrame

Está comprobado que mostrarle a la persona cómo hacer algo es, en muchos casos, mejor que decírselo. Y paciencia, porque necesitan que le repitan las cosas varias veces para aprender algo nuevo. Por ejemplo, si queremos hablar sobre las actividades que haremos en el día, puede ayudar escribirlo en un calendario bien visual, que detalle gráficamente la transición entre acciones.

3. Mirá todo lo que hago, no te enfoques en lo que no

Hay muchas cosas que las personas con autismo saben y pueden hacer. Evitemos entonces concentrarnos en las cosas que no pueden, o que más les cuesta. Es fundamental nunca resaltar los errores, y siempre que sea posible elogiar y destacar sus fortalezas.

4. No entiendo el doble sentido. Hablame en concreto

Las personas con autismo tienen la característica de interpretar el lenguaje de una manera literal. Por eso, se aconseja evitar las frases idiomáticas, los juegos de palabras, el doble sentido, los chistes complejos, las metáforas o el sarcasmo.

5. Ayudame con las interacciones sociales

A las personas con autismo se les dificulta charlar, romper el hielo para iniciar una conversación o unirse a un juego si no lo invitan. Esto no significa que no quieran socializar, sino que les resulta muy complicado leer expresiones faciales o interpretar el lenguaje corporal. Es importante ayudarlos a ser parte, integrándolas de manera natural, siendo concretos y claros con la invitación o la propuesta que les hacemos.

Si te cuesta comprender estas habilidades diferentes que poseen las personas en el espectro autista, podés simplemente trabajar la aceptación. Es decir, tratarlas como miembros de un grupo minoritario que tienen los mismos derechos que nosotros, abrazando al autismo como una parte natural de la diversidad que nos caracteriza como seres humanos.

Fuente consultada: elsevier.com