El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es una afección de salud mental que algunas personas desarrollan tras experimentar o ver algún hecho muy significativo, como una muerte cercana, un accidente automovilístico o una agresión sexual.
Es normal sentir miedo durante y después de una situación traumática. Pero las personas con TEPT no se recuperan rápidamente. Se sienten estresados y asustados mucho después de que el trauma terminó.
Síntomas principales
Hay cuatro tipos de síntomas de TEPT, aunque cada persona los experimenta a su manera:
- Reviviscencia: es decir, volver a experimentar los síntomas. Algo te recuerda el trauma y sentís miedo una y otra vez. Ejemplos: flashbacks, pesadillas, pensamientos aterradores.
- Evasión: es un síntoma que te lleva a evitar situaciones o personas que te hacen acordar a aquel hecho traumático. Por ejemplo, no ir a un lugar, no manejar más (si tuviste un choque automovilístico), o intentar estar todo el tiempo ocupado para no pensar en nada malo.
- Hipervigilancia y reactividad: son síntomas que nos hacen sentir fácilmente sobresaltados, tensos o “al límite”, tener dificultad para dormir o ataques repentinos de ira.
- Síntomas cognitivos y del estado de ánimo: que se manifiestan como pensamientos o sentimientos negativos. Por ejemplo, problemas para ver algo positivo sobre uno mismo o el mundo, sentimientos de culpa y remordimiento, pérdida del interés por cosas que antes disfrutabas o dificultad para concentrarse en una tarea, especialmente si es algo placentero.
Los síntomas generalmente comienzan poco después del acontecimiento traumático. Pero a veces pueden tardarse en aparecer meses o años. También pueden ir y venir por muchos años.
Fuente consultada: medlineplus.gov