¿Por qué el otoño es la peor época para el asma infantil?

El otoño es la peor época del año para el asma infantil por varios factores. Por un lado las bajas temperaturas y el incremento de la humedad. Por otro, coincide con el inicio de las clases y las guarderías y comienzan los contagios de distintos virus y ácaros. 

Todas estas condiciones afectan los bronquios especialmente de los niños que ya sufren asma, haciendo que aumente la inflamación de los mismos.

Consulta médica: la clave

Es clave realizar una consulta inmediata con el médico pediatra, el cual hará el diagnóstico en cada caso. Los principales signos que indican un posible asma infantil son la tos, los silbidos en el pecho y la dificultad para respirar.  El pediatra puede hacer un diagnóstico de asma al observar la reiteración de estos síntomas en un período de tiempo determinado. 

Sin embargo, si los casos o los síntomas no son tan claros, es posible que el niño deba ser derivado a un especialista en asma y alergias para que realicen las pruebas necesarias que permitan confirmar el diagnóstico y el tratamiento adecuado en su situación. 

Causas más frecuentes del asma infantil

Además de las condiciones climáticas y los contagios virales, hay otros factores que influyen en la aparición del asma infantil, como el ejercicio intenso, el aire frío, la contaminación y las emociones. La dieta de la madre durante el embarazo o el consumo de tabaco son otros factores de riesgo para el desarrollo de sibilancias en bebés durante el primer año de vida, que luego pueden volverse crónicas.  

¿Qué tratamientos existen?

La medicación recomendada por el profesional va a depender directamente del diagnóstico y del tipo de asma que padece el niño. 

Por ejemplo, si se busca atender los síntomas llamados “de rescate” (los que aparecen de repente) se usan fármacos broncodilatadores como el Salbutamol que relajan los músculos bronquiales y hacen que se ensanchen para que pase mejor el aire. 

Los pacientes con asma infantil pueden recibir tratamientos preventivos de largo plazo que deben administrarse a diario para disminuir la inflamación crónica de los bronquios.

Ante la menor duda consultar con tu médico

Fuente consultada: diarideterrassa.com